Ha pasado más de un año desde que, el 31 de diciembre de 2019, China dio la voz de alerta a la Organización Mundial de la Salud (OMS) ante la aparición de casos de neumonía de causa desconocida. Nueve días después se sabía que el brote estaba provocado por un nuevo coronavirus. El 11 de enero la OMS recibía de China la secuencia genética del patógeno; el mismo día que los medios de comunicación del país informaban de la primera víctima mortal.
Desde entonces, el mundo ha cambiado. Se han infectado 100 millones de personas en todo el mundo, de las que han muerto dos millones. Todos hemos hecho un curso intensivo sobre el SARS-CoV-2 y sus efectos, universales y ubicuos. ¿Qué lecciones hemos extraído? Seguir leyendo 34ª Asamblea de Socias y Socios de ASPA